Higüey. Una mujer de nacionalidad haitiana murió la noche de este martes afectada por los gases de las bombas lacrimógenas lanzadas por agentes policiales en el segundo día de un paro en esta provincias en reclamo de varias reivindicaciones.
Sin embargo, las autoridades gubernamentales y locales ignoraron el paro cívico de 48 horas que se realizó en la ciudad de Higüey, provincia La Altagracia, convocado por el Frente Amplio de Lucha Popular (Falpo) y otras 35 organizaciones.
El presidente de la Junta de Vecinos de Higüey, Felipe Martínez, explicó que las acciones de protesta, para exigir obras de viales, acueducto, energía eléctrica y salud fueron acogidas por los transportistas, comerciantes y la población en general en un 98%.
“A pesar del éxito del paro, nadie se presentó oficialmente a atender nuestras solicitudes y sólo nos enteramos por un medio de comunicación televisivo que un general se propuso para servir como enlace ante el Presidente”, expresó. Martínez aseguró que los resultados de la protesta serán evaluados por la coalición hoy jueves, a fin de definir nuevas estrategias y aclaró que no se detendrán y continuarán trabajando para que las obras lleguen hasta La Altagracia e Higüey.
Los habitantes del sector Villa Cerro, conformado por 18 comunidades y más de 40 mil personas, protagonizaron durante la noche del martes una batalla campal contra funcionarios adscritos a los organismos de seguridad, quienes durante más de tres horas mantuvieron cerradas las principales vías de acceso a la zona.
La señora Evarista Pérez, quien vive en la comunidad desde hace ocho años, narró que aproximadamente a las 11:00 de la noche, pobladores comenzaron a incendiar gomas, colocar basura y escombros en diversas calles, a fin de evitar el ingreso de vehículos y motores, acciones que fueron repelidas por la Policía que, en una acción desproporcionada, lanzó una gran cantidad de bombas lacrimógenas y perdigones, afectando varias personas incluidos niños y ancianos.
Además, denunció que los cabecillas de la huelga sólo se dedicaron a convocar el paro, pero dejaron solos a los pobladores durante las acciones de protesta.
“Ellos sólo se dedicaron a dar declaraciones a los medios, pero el pueblo fue el que sufrió las consecuencias de la acción policial, del cierre de los comercios y del deterioro que se causó a las calles por la quema de gomas y basura”.
El paro dejó un saldo de un muerto y seis heridos. Una dama de origen haitiano y de nombre Orguina Chery Doce, de 25 años, falleció asfixiada la noche del martes en el sector Villa Cerro, presuntamente como consecuencia del gas lacrimógeno que lanzó la Policía para enfrentar a los manifestantes del sector, quienes con la quema de gomas y basura, cerraron la calle Rodríguez Aristy. Emelinda Foster, familia de la víctima, aseguró que los organismos de seguridad se excedieron en el uso de la fuerza.
Los resultados de la protesta serán evaluados por la coalición, este jueves, a fin de definir nuevas estrategias.
