Menos de una semana después de haber enviado a sus pequeñas hijas a cometer un atentado suicida en una estación de policía en Damasco, el terrorista Abu Nimr fue abatido en Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó que el yihadista fue asesinado en combate en Teshreen, Damasco.
En las últimas horas circularon imágenes del cuerpo del terrorista.
La semana pasada el cruel yihadista grabó el momento en que sus pequeñas hijas, Fátima, de ocho años, e Islam, de siete, saludan a su madre por última vez antes de llevar a cabo un atentado suicida en la capital siria.
«No van a tener miedo porque están yendo al Paraíso, ¿verdad?», les susurra a las pequeñas en la primera parte de la emisión, donde están vestidas totalmente de negro.
Luego, les ordenó que antes de detonar los explosivos debían gritar «Allahú Akbar» (Alá es grande).
Una vez que llegaron a la estación policial, su padre, a control remoto, detonó los explosivos.
Solo Islam murió. Fatima se salvó.
