En Brasil, los cariocas ganaron 2-1 con tantos de Juan y Felipe Vizeu; Teo Gutiérrez anotó el tanto de los colombianos
El brasileño Flamengo derrotó 2-1 al colombiano Junior de Barranquilla este jueves en Río de Janeiro en el partido de ida de las semifinales de la Copa Sudamericana y tomó ventaja de cara a la final de la competición. Los colombianos comenzaron ganando gracias al tanto de Teo Gutiérrez (20′), pero los cariocas voltearon el partido en el segundo tiempo con goles de Juan (75′) y Felipe Vizeu (81′), llevando al Maracaná al delirio.
El primer tiempo comenzó lento para el Junior de Barranquilla, que se replegó en su área tras la marca constante de Flamengo. Los cariocas arriesgaron más en cancha durante el arranque pero fueron los colombianos quienes metieron miedo en el primer cuarto de hora con el mediocampista Yony González, que entró aprovechando un error en la línea defensiva del Mengao. La jugada dejó afuera, por lesión, al portero Diego Alves.
El gol llegó para el club tiburón con un centro de Mier que Teo (20′) no desaprovechó, dejando sin alternativas a Muralha, con menos de un minuto en campo reemplazando a Alves. Flamengo intentó recuperarse, del gol y de la sorpresiva baja del portero titular, con una hinchada que dejaba claro que estaban en casa.
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Jugadas de peligro se vinieron, como un tiro lejano de Mancuello y un cabezazo posterior de Felipe Vizeu, pero este parecía peleado con un tanto que no llegaba. En cambio los colombianos volvieron a meterle el miedo en el cuerpo a sus rivales con un contraataque de Yimmi Chará (34′), que no entró por poco.
En la recta final del primer tiempo el juego fue más trabado, con ambas oncenas tratando de salir, de forma desorganizada, del mediocampo. Antes del intervalo, los cariocas persistieron en el área contraria pero la marca colombiana se mostraba más precisa que las entradas de los locales.
La presencia del árbitro venezolano José Argote, que ya había levantado críticas de los brasileños antes del juego, también generó reclamos en el gramado, incluyendo el llamado a falta en la jugada que dio lugar al gol del Junior.
La tensión entre algunos jugadores se sintió también desde los primeros minutos en un partido en el que la rivalidad era inexistente. Y es que Flamengo y el cuadro de Barranquilla no se enfrentaban desde hacía 33 años.
El «Fla» se fue al vestuario encarando una derrota en casa y el reproche de una fanaticada que no ha conseguido celebrar un título en esta temporada y que, para colmo, acaba de perder a su estrella, el peruano Paolo Guerrero, sancionado recientemente por un resultado adverso en un control antidopaje.
El complemento mantuvo el mismo ritmo de los primeros 45 minutos: un Flamengo más insistente confrontado con un Junior más contundente. El delantero Réver marcó la entrada más clara de los locales con un cabezazo que puso la bola por la esquina izquierda. Viera defendió para Barranquilla en una de las mejores apariciones de la noche.
Pero Juan (75′) reivindicó al Mengao y despertó a la nacao urubu en el Maracaná al finalizar un pase de Trauco y sellar el empate. Faltaba fútbol pero no emoción. Con el gol carioca el juego tomó un nuevo aire. El tiburón fue de inmediato a la caza del gol que les permitiera volver a saborear la final del torneo, pero fue Felipe Vizeu quien sentenció al final que la noche sería carioca. Los últimos minutos se vivieron con pasión en un Maracaná que no paraba de celebrar.
El partido de vuelta se disputará el próximo jueves en el estadio Metropolitano de Barranquilla, el mismo día en que está marcado el juicio de Guerrero. Con su victoria en Río de Janeiro, Flamengo necesita apenas un
empate para disputar su primera final de la Copa Sudamericana. El rival en el juego decisivo saldrá del vencedor del cruce entre Independiente (0) y Libertad (1).
Fuente: AFP
